Masaje Hawaiano o “Lomi Lomi”

El masaje hawaiano, también llamado masaje lomi lomi nui, es una maravillosa manera de estimular los músculos y relajarlos. Esta forma de trabajo corporal sagrado proviene principalmente de las tradiciones espirituales de los hawaianos originales de la Polinesia. Estas tradiciones anteriores a la colonización occidental trataban el cuerpo y la mente a través de la filosofía nativa Huna, formando parte de un rito de iniciación practicado exclusivamente en los templos o “Heiau“.

Tiene como uno de sus propósitos relajar no sólo los músculos sino el espíritu. Es un masaje profundo, fluido y rítmico, que utiliza tanto las manos como los antebrazos, abarcando extensas zonas corporales permitiendo realizar un masaje firme y controlado.

Una de las claves del masaje lomi lomi nui hawaiano radica en actuar al mismo tiempo sobre zonas distales del cuerpo y tratando varias zonas a la vez, ya que al cerebro le cuesta concentrarse en dos áreas diferentes y se “deja llevar” por un balanceo rítmico que ayuda a restaurar la circulación energética mejorando el estado físico, mental y espiritual de la persona.

La experiencia de recibir Lomi Lomi a cuatro manos tiende a llevar al paciente a un nivel aún mucho más profundo de relajación, ya que resulta imposible focalizarse en las cuatro manos que trabajan distintas partes del cuerpo a la vez.

Lomi Lomi a cuatro manos

 

La experiencia de recibir Lomi Lomi a cuatro manos tiende a llevar al paciente a un nivel aún mucho más profundo de relajación, ya que resulta imposible focalizarse en las cuatro manos que trabajan distintas partes del cuerpo a la vez.

Beneficios:

  • Al trabajar sobre las tensiones musculares, ayudamos también a desbloquear líneas energéticas (meridianos de acupuntura) y articulaciones;
  • Mejoramos el drenaje de fluidos (linfa, sangre) y optimizamos el funcionamiento de los órganos.
  • Sin olvidar, por supuesto, el efecto equilibrante (relajante o tonificante) que tiene el contacto terapéutico de un profesional en el cuerpo de otra persona.
  • Una terapia que trata al mismo tiempo los niveles físico, emocional, mental y espiritual del ser humano, logrando una suave pero intensa relajación.

Indicaciones:

Prevenir la tensión corporal. Eliminar dolores.
Eliminar el estrés y la depresión.
Liberar bloqueos y sentimientos reprimidos.
Fortalece el sistema inmunológico.
Estimular la circulación sanguínea y linfática.
Mejorar la capacidad respiratoria haciéndola más profunda.
Aportar mayor flexibilidad a los músculos y movilizar las articulaciones.